El vino se presenta como una alternativa de inversión que genera rendimientos a largo plazo superiores a las acciones globales o las del oro.

El mercado de inversión en vinos de “alta gama” o “vinos de lujo” ha crecido significativamente durante la última década a medida que la demanda por estos vinos continúa aumentando cada año. Esto impulsó un crecimiento promedio de los precios durante los últimos 5 años, alrededor de 76% en Borgoña y de 77% en Champagne, marcas reconocidas como de alta gama. Esto según Vin-X, plataforma inglesa dedicada a gestionar y asesorar inversiones en vinos de lujo.

En la bolsa de Londres, el índice de referencia para el mercado del vino, Liv-ex 1000, ha subido 26.5% en dos años y 38.9% en los últimos cinco años, lo mismo pasó con el Liv-ex 100 que ha subido 24.4% en los últimos dos años y 32.9% en cinco años, comparado con el 12.4 y 4.8% del índice de acciones FTSE 100 referente del mercado londinense, respectivamente.

Las inversiones alternativas, como las del vino de lujo suelen comercializarse independientemente del comportamiento de la economía.

En las fases de auge, el aumento de la demanda y la escasez de estos productos pueden provocar que suban los precios, y en escenarios de crisis económicas suelen permanecer bastante estables.

El placer de contar con una reserva de lujo en la cava; la ganancia de capital que genera el activo; la diversificación de cartera; y el símbolo de estatus que genera, son de las principales razones para invertir en artículos de lujo.

Así que, si tienes gusto por los “buenos” vinos y además te gusta invertir en la bolsa de valores, aquí te dejamos una opción más.